Si J. R.
R. Tolkien hubiese sido el creador de esta maravillosa joya, tal y
como hizo con el “Daño de Isildur” en su obra “Legendarium”;
la brillante inscripción al calentarlo hubiese sido:
“Un
Anillo para seducirlos a todos. Un Anillo para deleitarlos, un Anillo
para encantarlos a todos y atarlos en la complacencia”.
Ese
anillo es “Neova”.